Greg Egan - Axiomático

Descripción tomada de acá

Cuando alguien que ha leído mucho recomienda con mucha vehemencia un libro en concreto es recomendable darle una oportunidad a dicho libro. Aunque sea difícil de encontrar y no tenga edición de bolsillo. La ventaja de vivir al lado de Barcelona es que difícil de encontrar es solo un concepto abstracto así que al final Allan no me tuvo que enviar el libro desde Granada.

Pero vayamos al turrón. Axiomático es una joya de la ciencia ficción dura. Greg Egan, matemático de formación y programador de profesión, nos regala 18 relatos originales, diferentes a la ciencia ficción clásica de Lem o Asimov pero con tanta o más calidad que la de estos.

Los relatos tocan muchos términos complejos de la Física y las Matemáticas como el Conjunto de Cantor (en El Asesino Infinito), los Atractores Extraños (en Órbitas Inestables en el Espacio de las Mentiras), la pérdida de información en un agujero negro (enHacia la Oscuridad) o la violación del Principio de Causalidad (en El Diario de Cien-Años-Luz). Así pues para aquellos que no estén familiarizados con los términos el libro puede ser algo difícil.

Por el contrario para los que sí estamos familiarizados con el tema las descripciones ganan una profundidad y una simplicidad inusitada. Si a un matemático le explicas que algo es un Conjunto de Cantor no sólo puede hacerse una idea de la forma que tiene, sino de un montón de otras cualidades: es un conjunto discreto, de cardinal infinito no numerable, tiene medida cero… y en este caso esas cualidades tienen implicaciones en el relato (El Asesino Infinito) que seguramente no serán captadas a menos que sepas de lo que está hablando Egan.

Otras veces los guiños al lector geek son menos relevantes pero igualmente destacables:

En la pared, una reproducción enmarcada de una litografía de Escher: Bond of Union, un retrato del artista y, presumiblemente, su esposa pelados como limones formando hélices de cáscara, unidos en una única banda. Recorrí la superficie externa de principio a fin, y me decepcioné al comprobar que no tenía el giro de Moëbius que había estado esperando.

Es especialmente interesante el relato Hacia la Oscuridad, que describe con gran precisión cómo debe ser adentrarse en un agujero negro alejándose de las imágenes más típicas y tópicas del género. Es, a mi entender, el mejor de todo el libro.

Pese a toda la carga física y matemática de sus relatos, la mayoría de estos se centran en un eje que vertebra la obra: La esencia de la identidad humana. Para Egan (que hubiese sido un digno discípulo deDick) es importante determinar qué significa ser “humano” y donde estarán los límites cuando los avances tecnológicos nos permitan hacer determinadas cosas que ahora no podemos hacer: simular un cerebro, volcar un cerebro en un ordenador, cambiar de cuerpo, modificar nuestras creencias mediante software, etc… Son especialmente buenos en este sentido los relatos: La Caja de Seguridad, Axiomático, Un secuestro, Aprendiendo a Ser Yo, El Paseo y Cercanía.

La Genética también tiene su rinconcito destacado en esta recopilación con: La Caricia, Eugene,Hermanas de Sangre, El Foso y el Virólogo Virtuoso. Este último relato es, junto con Órbitas Inestables en el Espacio de las Mentiras, una ácida crítica a las religiones.

También me gustaría destacar las pinceladas de humor con las que Egan salpica sus relatos. Dejo aquí un par las mismas:

Evidentemente las investigaciones de Cook siguieron avanzando sin ellos. Tuvo éxito en crear cuatro chimpancés que podían cantar, y comprender, country y western, por lo que ganó el premio Nóbel y un Grammy.

Aún así, por primera vez en nuestras vidas, habríamos vivido exactamente la misma experiencia, desde el mismo punto de vista, aunque la experiencia no fuese más que pasar ocho horas encerrados en habitaciones separadas, y el punto de vista fuese el de un robot sin sexo con una crisis de identidad.

En definitiva, muy recomendable para todo aquel que guste de la mejor ciencia ficción dura.